Se cumplieron seis meses del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
La Cuarta Transformación (4T) enfrenta la realidad.
La luna de miel ha terminado.
Los leales a Morena y a su creador y dueño, aseguran que éste ha tomado decisiones difíciles, duras, pero necesarias.
Los críticos, que no son parte de los 30.1 millones que votaron por él, afirman que este es un gobierno de ocurrencias, sin planeación, que ha traicionado a quienes le apoyaron y que su dicho “Primero los pobres” fue sólo eso: un dicho.
La matanza de Minatitlán, Veracruz, había sido, hasta ahora, la peor crisis, comparada, incluso, con Ayotzinapa.
La creciente inseguridad y violencia, herencia de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña, es imparable y esa ejecución de catorce personas, incluido un niño, exhibió la debilidad del Estado nuevamente.
El desencuentro con Donald Trump que comenzó el jueves y creció hasta niveles insospechados ayer, aunque distinto, le supera.
Es la primera ocasión que López Obrador contesta directamente a los ataques y presión del republicano que, pese a los halagos al grado de adulación, ha mantenido su estrategia de bullying a México, utilizada desde la campaña presidencial de 2016 en el gobierno de Enrique Peña Nieto.
Hoy busca relegirse y como Irán y Corea no le funcionaron, utiliza a México.
Andrés Manuel encendió las redes con su carta de dos cuartillas que hizo recordar aquel mensaje en video de Peña Nieto en abril de 2018.
Despertó a los patriotas y a los patrioteros.
Entonces, hubo una reacción de unidad.
Ahora, Fox y Calderón criticaron. Peña calló, pero su ex jefe de la oficina, Francisco Guzmán Ortiz, ofreció su apoyo y se puso a disposición de López Obrador.
Ayer, Trump tuiteó cuatro veces y no le importó la carta.
Lo hizo mientras López Obrador hablaba en su mañanera, donde dijo que confía en que el estadunidense rectifique.
Y en lo financiero, el panorama no es distinto. Los despidos, los recortes, los ajustes al pronóstico de crecimiento de las corredurías –ayer lo hicieron de nuevo Fitch Ratings y HR Ratings– y los analistas pintan un panorama tétrico.
La inversión pública y privada está detenida.
El dólar volvió a niveles de 20 pesos, la Bolsa perdió 1.38 por ciento.
Hasta el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo Garza, reconoció que el apretón ha sido durísimo, que se les pasó la mano con la austeridad y que en septiembre liberarán la inversión para favorecer creación de empleo.
Quizá sea tarde.
Habrá iniciado la recta final del año y el daño estará hecho.
-Por abordar vuelo a Washington vía Houston, acabo de tener llamada con Jared Kushner y con Mike Pompeo. Se inicia proceso de negociación. Escuché interés y respeto a la carta del Presidente López Obrador. Avanzamos.
Así reportó Marcelo Ebrard Casaubon desde el viejo, saturado y mugroso aeropuerto internacional de la Ciudad de México, poco antes de tomar el vuelo, con escala en Houston, para hacer fila en espera del yerno más poderoso del mundo y del secretario de Estado.
Que le hagan un huequito en su agenda, lo que sucederá, según el canciller mexicano, hasta el próximo miércoles.
México no tiene forma de enfrentar al país más poderoso del mundo.
Kushner, dizque amigo de Luis Videgaray, compa de Peña Nieto, ha sido el contacto desde entonces. Hoy es la esperanza de Ebrard y Andrés Manuel.
Y mañana hay elecciones en seis estados. Será un referéndum, sin duda.
Patadas de ahogado
La renovación de la dirigencia del Partido Revolucionario Institucional (PRI) es un strike cantado.
Luego del cónclave en Toluca, Estado de México, y de que once de doce gobernadores priístas dieran su apoyo a Alejandro Moreno Cárdenas como candidato de unidad, ayer se reunieron los otros cuatro aspirantes.
Encabezados por José Narro Robles, ex rector y priísta de toda la vida, echaron café en Polanco. Estaban Ivonne Ortega, Ulises Ruiz y José Ramón Martel.
Según ellos, fijaron una estrategia para evitar una decisión cupular.
¿Y todos ellos no son producto de una decisión cupular?
Vámonos:
Claudia Sheinbaum dio la orden y los morenos acataron: quitaron la ventaja a los inquilinos gandallas, que hasta los indemnizaba.
Sheinbaum pensó electoralmente.
Insiste en hacer todo lo que su jefe: quiere consulta para revocación de mandato el día de la elección. Dice que es para ahorrar.
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