CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- El Pleno del Senado de la República aprobó la minuta que reforma, adiciona y deroga diversas disposiciones de la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos, para simplificar la carga fiscal en la exploración y extracción de petróleo y gas.
El proyecto recibió 85 votos a favor y 29 en contra en lo general, mientras que en lo particular la minuta obtuvo 80 votos a favor y 35 en contra. Además, se desecharon las reservas presentadas por diversos legisladores, por lo que quedó en sus términos; posteriormente, el decreto se remitió a la titular del Ejecutivo federal para sus efectos constitucionales.
La reforma establece el Derecho Petrolero para el Bienestar, que fija tasas de 30 por ciento para el petróleo y 11.6264 por ciento para el gas. Además, se eliminan de la ley el pago de impuestos y derechos de Utilidad Compartida, de Extracción de Hidrocarburos y de Exploración de Hidrocarburos.
Asimismo, acorde con la reforma constitucional en materia de simplificación orgánica, que entró en vigor en 2024, se transfieren a la Secretaría de Energía las atribuciones de la extinta Comisión Nacional de Hidrocarburos. También se agrega cómo se enterará el Derecho Petrolero para el Bienestar, así como los plazos para pagos provisionales mensuales que tendrán que realizar los asignatarios.
Al presentar el dictamen, la presidenta de la Comisión de Energía, Laura Itzel Castillo Juárez, aseguró que esta reforma fortalecerá de manera integral a Petróleos Mexicanos (PEMEX), pues le permitirá mejorar su capacidad operativa y optimizar el uso de ingresos para atender sus necesidades de inversión.
Precisó que los cambios buscan aliviar la carga de costos operativos que enfrenta la empresa, con la finalidad de que los ingresos generados puedan destinarse de manera más eficiente a proyectos estratégicos, mantenimiento de infraestructura y expansión de sus capacidades productivas, porque “las administraciones anteriores a 2018 convirtieron a PEMEX en un botín, y se le aplicó un régimen fiscal asfixiante”.
Castillo Juárez consideró fundamental que Petróleos Mexicanos cuente con un esquema fiscal que le permita no sólo cumplir sus obligaciones financieras, sino fortalecer su posición en el mercado energético para garantizar su viabilidad y contribución al desarrollo económico de la nación; “es fundamental construir una república con soberanía energética”, puntualizó.
Beatriz Silvia Robles Gutiérrez, de Morena, manifestó que las empresas públicas del Estado no son para hacer negocios, sino para garantizar derechos, bienestar y soberanía; por ello, la reforma “corrige el desastre que dejaron el PRI y el PAN, ya que mejora la rentabilidad de la empresa y su flujo de efectivo, reduce su deuda y le da autonomía financiera en beneficio de la población”.
De Acción Nacional, Agustín Dorantes Lámbarri señaló que PEMEX está en terapia intensiva, porque sus pérdidas y adeudos suman 5.7 billones de pesos, lo que además hace evidente el fracaso, por ejemplo, de la refinería de Dos Bocas. Añadió que fue en el sexenio anterior en el que menos renta petrolera obtuvo la empresa, y con esto “le seguimos echando dinero bueno al malo”.
Manuel Añorve Baños, senador del PRI, anunció que su grupo parlamentario votaría en contra del dictamen, porque hay gran opacidad y asignaciones directas desde la Secretaría de Energía. “El oficialismo hoy hasta defiende la deuda de la empresa, y ya ni decir que no cumplieron lo que prometieron desde el sexenio pasado: que el litro de gasolina costaría 10 pesos”.
Por el PVEM, Virgilio Mendoza Amezcua urgió replantear el régimen fiscal de Petróleos Mexicanos para que pueda cumplir con sus obligaciones contractuales y al mismo tiempo invierta en su propio desarrollo, porque la empresa, agregó, no puede ser el principal motor de desarrollo del país si no cuenta con finanzas sanas y buena administración de sus ingresos.
Lizeth Sánchez García, del PT, expresó que con la actualización de esta ley se incluye una visión de Estado para garantizar la soberanía energética y fortalecer a la petrolera como un pilar del desarrollo nacional, ya que responde a la necesidad de hacer más eficiente su régimen fiscal para que asegure su operación, que sea financieramente sostenible e impacte favorablemente en el desarrollo del país.
De Movimiento Ciudadano, Alejandra Barrales Magdaleno recordó que PEMEX paga más de 400 millones de pesos diarios por los intereses de su deuda, situación preocupante y que, advirtió, “no se va a resolver” con esta reforma; lo que se hará es “suministrar oxígeno a la empresa para que logre la viabilidad financiera que necesita”.