CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- Al decretar las primeras Zonas Económicas Expeciales (ZEE), el presidente Enrique Peña Nieto advirtió que no se permitirá que la historia del sur-sureste del país siga marcada por la pobreza, la marginación y la desigualdad.
El mandatario expuso que esas zonas serán “un parteaguas en el desarrollo de esta entrañable región”, que marcarán un antes y un después para las familias y comunidades.
Se prevé que en las ZEE de Puerto Chiapas; Lázaro Cárdenas, Michoacán; y Coatzacoalcos, Veracruz, haya inversiones a partir de los compromisos hechos hasta el momento por 50 empresas -de 250 que tienen potencial de invertir- de por lo menos cinco mil 300 millones de dólares, y la generación de más de 12 mil empleos en los primeros dos y tres años.
Acompañado por los secretarios de Economía, Ildefonso Guajardo; Hacienda, José Antonio Meade; Desarrrollo Social, Luis Enrique Miranda; y Agricultura, José Calzada, explicó que este modelo, que se aplica en varios países, permite al gobierno adquirir tierras para generar incentivos, “cambiar el rostro” de zonas que hoy tienen pobreza y marginación en regiones productivas.
Reconoció que esta transformación “no será fácil ni tampoco rápida, va a trascender a esta administración y a otras, pero estamos sembrando en terreno fértil”, al tiempo que se están dejando atrás los asistencialismos, que es un apoyo económico que a veces mitiga la condición de pobreza pero no la resuelve.
Es la inversión productiva, el capital humano y la buena educación que reciban los niños y jóvenes lo que va a permitir transformar estas regiones, subrayó.
En el acto -al que asistió el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Alberto Moreno Mejía- apuntó que el potencial es de un futuro alentador y promisorio para México, a partir de experiencias internacionales que han sido exitosas.
