Se fue 2023 y ha comenzado el año más importante en la historia moderna de México, porque en las elecciones del domingo 2 de junio estará en juego el futuro del país, sin exagerar, con más de 20 mil cargos públicos en juego, incluida la Presidencia, la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, 8 gubernaturas y 500 diputaciones y 128 senadurías.
De que los mexicanos salgan a votar y haya una mayor participación que la promedio cada seis años -62 por ciento- depende la continuidad de un gobierno fallido y de ocurrencias, basado en la compra del voto con dinero regalado, en la mentira y en la polarización con el discurso del pobre bueno y el rico malo, o el cambio para que terminen las incongruencias y haya un gobierno con metas y programas reales, que no destruya y tenga sentido social.
Los votantes deberán elegir entre dos opciones: Claudia Sheinbaum Pardo, de Morena y rémoras, y Xóchitl Gálvez Ruiz, del PRI, PAN y PRD.
Más de un millón de muertos por Covid-19 por no implementar restricciones y el uso del cubrebocas y, por el contrario, invitar a la población a continuar con su vida normal, es algo que los mexicanos no debieran olvidar.
Que el dinero no debe encubrir.
Por eso, impedir que Hugo López-Gatell Ramírez, responsable del combate al coronavirus, brinque al Congreso como diputado para tener fuero, debe ser prioridad para los votantes.
Al menos 200 mil asesinatos, en el sexenio más sangriento y mortífero de la historia debido a la fracasada estrategia de abrazos, no balazos, tampoco deben pasarse por alto.
Miles de enfermos sin medicinas, niños y mujeres con cáncer sin quimioterapias. Al menos 50 millones de personas sin atención médica por la desaparición del Seguro Popular, convertido en el fracasado Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) y un sistema de salud que jamás será como el de Dinamarca, como prometió -¡adivinó!- López Obrador.
Sí, el señor de las ocurrencias.
La farmaciotota, por cierto, que se inauguró el viernes pasado en Huehuetoca, Estado de México, en unas antiguas bodegas compradas a Liverpool, significar+a un gran, enorme, daño.
El fraude en Segalmex duplica los 7 mil 600 millones de pesos de la llamada Estafa Maestra, cometida en el gobierno de Enrique Peña Nieto mediante la triangulación de recursos mediante universidades y en la que está implicada Rosario Robles, ex secretaria de Desarrollo Social.
Y viene a la mente, entonces, la popular frase “Nadie sabe, nadie supo, dónde quedó el dinero de la Conasupo”.
Conasupo (Compañía Nacional de Subsistencias Populares), fundamental en las décadas del setenta y ochenta y dirigida por Ignacio Ovalle Fernández, amigo y mentor de López Obrador, también sufrió diversos fraudes y manejos irregulares de recursos.
Hoy, treinta años después, han desaparecido 15 mil millones de pesos de Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), dirigida nuevamente ¡por Ignacio Ovalle Fernández!
-Es de que no somos iguales, ha dicho mil veces el tabasqueño.
Efectivamente, no son iguales… son peores.
Y el Ejército que llamaba criminal y calificaba de asesino cuando candidato, hoy ha sido empoderado y sobrecargado como nunca.
A todo ello hay que sumar las obras insignes de este sexenio: Tren Maya, Tren Interoceánico, refinería Dos Bocas y más.
Basta recordar cómo para este año se aprobaron 800 mil millones de pesos en el presupuesto para pensiones, becas y apoyos sociales, que significan votos.
Sí, en esa millonada están incluidos 6 mil pesos bimestrales a 12.1 millones de adultos mayores. Más de 465 mil millones de pesos.
Ya lo dijo el mismo Andrés Manuel López Obrador, en enero de este año:
–Ayudando a los pobres va uno a la segura, porque ya se sabe que cuando se necesite defender, en este caso la transformación, se cuenta con el apoyo de ellos. No así con sectores de clase media ni con los de arriba ni con los medios ni con la intelectualidad. Entonces no es un asunto personal, es un asunto de estrategia política.
Más claro ni el agua.
Los 872 mil millones de pesos que el gobierno de Andrés Manuel utilizó el año pasado en 65 programas sociales son la cifra más alta en la historia del país.
De éstos, la Secretaría del Bienestar manejó 414 mil 632 millones de pesos, cifra jamás vista para una dependencia.
Los programas más beneficiados son pensión para adultos mayores, Sembrando Vida y pensión para personas con discapacidad.
El dinero se entrega a la población más vulnerable, aunque eso está por verse, porque aunque un adulto mayor, por ejemplo, esté pensionado ya recibe también el dinero procede de la serie de recortes obsesivos en todas las oficinas de gobierno.
Con el argumento de la corrupción.
Por eso no hay ni ambulancias cuando se acude a un servicio médico público o hay que esperar hasta 24 horas para que un enfermo sea trasladado.
¡Ah, pero este año ya será un sistema de salud como el de Dinamarca! O mejor.
El (des) gobierno de López Obrador está ya en su recta final con la misma estrategia: engañar, mentir, asumirse víctima de los conservadores y regalar dinero – 800 mil millones de pesos sólo en 2024-, con recortes obsesivos, que desmantelan estrategias y políticas sociales.
Le quedan 9 meses al tabasqueño para irse a su rancho en Palenque Chiapas.
La Chingada, le llaman.
Dice que se retirará y que jamás volverá a hablar, siquiera, de política.
Yo no le creo y, como dijera una clásica:
“¿Tú le crees a López? Yo no”.
Vámonos: Manolo Jiménez Salinas acudió a la sesión solemne en la cual se declaró legalmente constituido el Congreso del Estado Independiente, Libre y Soberano de Coahuila y se instaló Legislatura LXIII, la cual por primera vez en su historia estará presidida por una mujer, la diputada Luz Elena Morales Núñez.