CIUDAD DE MÉXICO, Méx.- La construcción del Tren Interurbano México-Toluca concluirá en tiempo y forma para julio de 2018, para después hacer las pruebas operativas previas desde Zinacantepec hasta Observatorio, esto es, de terminal a terminal.
Así lo aseguró el secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT), Gerardo Ruiz Esparza, al llevar a cabo un recorrido para constatar los avances de los dos túneles de nueve metros de diámetro a 180 metros de profundidad, donde se registra un avance de casi 2.7 kilómetros de perforación y construcción.
La dependencia recordó en un comunicado, que para la edificación se han utilizado hasta el momento tres mil 500 dovelas, de los más de seis mil 300 anillos que se tienen contemplados para la totalidad de los túneles.
Asimismo, el titular de la SCT constató los avances del Viaducto Elevado del tren, que correrá desde Zinacantepec hasta La Marquesa, donde se construyen los túneles.
Para el viaducto se han construido 942 columnas y se han instalado mil 686 trabes, que representan el 90 por ciento de avance, dijo la SCT.
El Tren Interurbano México-Toluca recorrerá 58 kilómetros de longitud lo que dará mayor seguridad a los pasajeros que viajan entre la capital del país y la del Estado de México.
Los trabajos donde se construyen los túneles se llevan a cabo con dos máquinas alemanas que perforan la zona de montaña en el Tramo II, ubicado en la zona cercana a la Marquesa, Estado de México, y simultáneamente, se colocan las dovelas y el concreto para darle el acabado.
El Tren México-Toluca contará con dos terminales (Observatorio y Zinacantepec) y cuatro estaciones intermedias (Santa Fe, Lerma, Metepec y Pino Suárez).
Se espera que este medio de transporte brinde servicio con estándares internacionales y comunicará a Observatorio en la Ciudad de México con la capital mexiquense en tan solo 39 minutos.
Cada convoy del tren está conformado por cinco carros, y una vez que entre en operación, se movilizarán de 230 mil a 240 mil pasajeros diarios.
Y al ser una obra de ingeniería amigable con el medio ambiente, permitirá que cientos de personas que utilizan vehículos para trasladarse diariamente entre ambas capitales por carretera, puedan utilizar este medio de transporte, con lo que se dejarán de emitir más de 28 mil toneladas de bióxido de carbono al día.