TOLUCA, Méx.- A tres años de la gestión de Angélica Rivera de Peña, al frente del Consejo Ciudadano Consultivo y con una estructura de mil 647 centros y Unidades Básicas de Rehabilitación (UBR), el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), brinda atención rehabilitatoria integral a la población de cualquier edad, que presenta algún tipo de discapacidad o factores de riesgo, lo que representa atención para casi tres millones de personas en todo el territorio nacional.
Al respecto, la esposa del presidente Enrique Peña Nieto, ha destacado que con la operación de mil 518 UBR, 102 Centros de Rehabilitación Integral (CRI), y 27 Centros de Rehabilitación y Educación Especial (CREE), se ha permitido a esta institución otorgar servicios de rehabilitación dirigidos a personas con discapacidad y con éxito, a fin de lograr su inclusión educativa, laboral y social, lo que ha contribuido a mejorar su calidad de vida.
Explicó que a la fecha en los CREE, personal altamente calificado realiza acciones de valoración y tratamiento mediante consultas médicas especializadas, consultas paramédicas de psicología, trabajo social y pedagogía.
Vale la pena destacar que en los centros mencionados se llevan a cabo estudios de gabinete como electroencefalografía, electromiografía, rayos “X”, terapia física, ocupacional y de lenguaje; además, se elaboran órtesis, prótesis y otras ayudas funcionales, así como evaluación de aptitudes y desarrollo de habilidades para el trabajo, todo ello, en beneficio de los pacientes que son atendidos en el SNDIF.
La esposa del presidente Enrique Peña Nieto destacó que tan sólo en los CREE se atienden a más de tres mil personas por año, en lo que se refiere al servicio de consulta médica de primera vez, así como a ocho mil pacientes de todas las edades que acuden a consulta médica subsecuente, con discapacidad motora, auditiva, de lenguaje y visual, o en riesgo potencial de presentar alguno de estos padecimientos.
En cuanto a los Centros de Rehabilitación Integral, precisó que se brinda atención a personas con discapacidad motora, auditiva, de lenguaje y visual, quienes reciben también consulta médica especializada.
En los CRI la recepción de pacientes de primera vez asciende a dos mil 500 personas, mientras que los de consultas subsecuentes suman un promedio de cinco mil cada año.
Por lo que se refiere a las UBR, éstas se constituyen en el primer nivel de atención en materia de rehabilitación, con el propósito de promover acciones de salud, prevenir la discapacidad y proporcionar tratamiento simplificado de alteraciones discapacitantes.
La Presidenta del Consejo Ciudadano Consultivo destacó que para dar óptimos servicios a sus beneficiarios, el Sistema Nacional DIF cuenta con personal altamente calificado que incluye especialistas en rehabilitación, ortopedia, oftalmología, psicología, pedagogía y comunicación humana, además de trabajadores sociales, terapistas y personal administrativo, entre otros.
Cabe señalar que además de las actividades asistenciales el Sistema Nacional DIF mantiene vigentes programas de formación de recursos humanos especializados en el campo de la rehabilitación, con reconocimiento y validez oficial otorgado por la Secretaría de Educación Pública.
Para este propósito, cuenta con 10 escuelas ubicadas en los Centros de Rehabilitación Gaby Brimmer e Iztapalapa, en la Ciudad de México; en los CREE de Toluca, Puebla, Ciudad Victoria, Chetumal, Monterrey, Oaxaca, Durango y Chiapas.
En el Centro de Rehabilitación Gaby Brimmer y en el CRI Guadalajara del DIF, también se han formado generaciones de médicos especialistas en medicina de rehabilitación, con el reconocimiento de la Universidad Nacional Autónoma de México y de la Universidad de Guadalajara, respectivamente.