“Yo no estoy loco señor/ se lo puedo asegurar yo soy fulano de tal y vivo en aquel lugar/ también uso zapatos, camisa y hasta escribo garabatos a usted y su abuelita achacosa/ no no estoy loco señor se lo puedo asegurar… y ahí les va otra rola con mucho cariño “….camino sobre sueños innecesarios y rotos/ muy clavado en momentos de semánticas gastadas/ y como hoja seca que vuela en el tiempo/ vuelo imaginario sobre historias de concreto/ ya que yo no tengo tiempo de cambiar mi vida/ la máquina me ha vuelto una sombra borrosa/ y aunque soy la misma hoja que ha negado tus ojos/ se que tengo tiempo para atracar en un puerto… y ya encarrilados “…hagase de aquí señor operador/ estoy un secuestro yo manejo el convoy/ hace muchos años que a
mi novia perdí/ por estas multitudes que se juntan aquí/ la busque en andenes y en salas de espera/ pero ella se perdió en la estación de Balderas/ fue en la estación del metro Balderas donde yo perdí a mi amor/ fue en la estación del metro Balderas/ llevame a Viaduto o Basílica donde quieras pero no me lleves a la estación del metro Balderas porque allí fue donde yo perdí a mi amor… y cuando menos se esperaban los niños cantores de San Lucas Matoni cuando unas cubetadas de agua los sacaron de su ensoñación, larguense a ladrar a otra parte, ya nos duele la cabeza con tantos berridos.
Eran los Naguales de Quetzalcoatl, grupo imberbe de aquella aldea siciliana ubicada junto al reino de Tenayucan, que se preparaba para emular a su recordado ídolo el Rockdrigo González, que por cierto el pasado 19 del septiembre Bicentenario, había cumplido otro aniversario luctuoso, cuando las toneladas del cemento del edificio donde dormía se derrumbo en el temblor de1985 lo sepulto.
Ahí estaba el Rufo, el Ruiseñor del notropil, el Chompis, y el Donovan, quien lastimado en su yo interno, invitó a los vatos -Yo creo que por el día de hoy ¿ya estuvo no? Mañana le seguimos, no hay que despertar la furia del respetable, mejor vamos a dar el rol porque aquí nuestra popularidad esta fracturada, ya la jefa se puso de genio. Los novatos músicos comenzaron a caminar y charlar, estaban entusiasmados desde el 15 de septiembre, cuando escucharon las bandas de rock que en el Deportivo Tlalli, que se descocieron para dar el grito del Bicentenario de la Independencia, donde estuvieron los rokanroleros, como León Vago, Angélica Infante, la nieta del ídolo Pedro, La Loba, la Tía de las Muchachas, que dio el grito, Neblina que cerro con broche de humo púrpura y el Haragán, Luis Álvarez, y Compañía, mi ídolo no te olvidare….que se discutió con hora y media con aquella de “…voy a cantar una tonada que se parezca a Pink Floyd/ una dulce carcajada ahogada en humo y alcohol/… a esa gran velocidad un impacto seria fatal… La inspiración les salía por los poros a los juglares del barrio, que comentaban que ahora si se había discutido la organización Crown del promotor cultural el Cuervo y del gritante de la Tía de las muchachas, Miguel el Seco García Franco, de Red Cultural De Artistas Independientes, quienes con el auspicio del alcalde Arturo Ugalde Meneses, se aventaron el númerito comentaban los chavales, quienes para relajarse ya se fumaban un cigarrillo de guerra por el Callejón de la Flaca. Ahí el Chompis comentaba a sus hermanos de sangra musical, de que ya esta en proyecto armar un espacio cultural como el del Tianguis del Chopo, -guardando las canijas proporciones-, le había contado el Blackbird, sería un buen punto para la banda juvenil que votara en el 2010 y 11 y -desmentir que no todos los jóvenes son Ninis-, tuvieran un espacio donde hubiera música en vivo, conferencias, programas preventivos de adicciones y sobre problemas de salud, exposiciones de fotografía, pintura, y el intercambio de libros discos y experiencias como la creación de esculturas como “Una llave para Rockdrigo” que impulsa RECAI, se el Seco, por cierto acotó el Rufo, se murió el cineasta Sergio García Michel, quien también promovía la rockescultura del Rockdrigo, quien no recuerda aquellas cintas “Un toque de rock”, “Porque no me las prestas” retratos de la banda rockanrolera de la contracultura del subterráneo y que por un infarto, se quedo con las ganas de estrenar “El cantar de los cantores”, la historia de los cantantes rupestres … bueno te imaginas un Tlanechopo aquí en la Tierra de enmedio, zona de poder de los neochichimecas, el impulso cultural a la localidad cuando lleguen por acá la Sineed O Connor, el Peter Murphi o el Manu Chao, Plácido Domingo, José Agustín, entre otros y visitar también la pirámide de Tenayuca, la de Santa Cecilia, estaría de lux ¡qué buen viaje!, secundó el Chompis, al tiempo que el Donovan con ojo clínico expresaba, se ve que fumaron de la cultural-propositiva, rolenla y ¿donde se ubicaría? Cuestionó. Uts sobran lugares, dijo el Rufo, pero esa es otra historia…