ITALIA.- El volcán siciliano Etna, muy cercano a la ciudad-puerto de Catania (costa este de Italia), volvió a experimentar una nueva erupción, aunque sin peligro, provocando una lluvia de pequeñas piedras volcánicas y ceniza sobre la ciudad, cuyo aeropuerto se mantuvo cerrado.
El hundimiento de una parte del cráter de la vertiente sureste provocó un desborde y un deslizamiento de lava a lo largo del flanco occidental, sin embargo, no ha puesto en riesgo a las aldeas habitadas cercanas al volcán, señaló un funcionario del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV) a la agencia Agi.