RUSIA.- Al menos 27 pasajeros resultaron heridos, entre ellos tres bebés, después de que un avión de la compañía rusa Aeroflot, que volaba de Moscú a Bangkok, fue sacudido por una extraña turbulencia, conocida como turbulencia de aire claro (TAC).
Alrededor de 40 minutos antes del aterrizaje en el aeropuerto de Bangkok, el Boeing 777 experimentó una violenta ascensión de hasta 200 metros, que afectó a los pasajeros que estaban de pie o no llevaban abrochados los cinturones de seguridad, informaron las agencias rusas de noticias Sputnik e Interfax.
Indicaron que al menos 27 pasajeros (24 rusos y tres tailandeses) que presentaban lesiones graves o fracturas fueron hospitalizados. Según los testigos, la fuerza atmosférica arrancó a tres bebés de los brazos de sus madres.
Varias fotografías y grabaciones tomadas por los pasajeros muestran a gente tumbada en el pasillo poco después de golpearse con el techo del avión, asimismo los equipajes, igual que la comida y las bebidas de los carros, quedaron esparcidos por todo el pasillo de la aeronave.