Valle Dorado no se olvida.
Las familias de esta zona residencial no olvidan aquel seis de septiembre en que el emisor poniente se colapsó y las agua negras en conjunto con la torrencial lluvia que cayó inundaron la zona, provocando pérdidas económicas millonarias, pero también la vida de varias personas cuyos familiares a la fecha no han sido indemnizados.