HISTÓRICAS OPORTUNIDADES
Tengo muy presente una historia de mi infancia. Jugando con mi hermano y desobedeciendo las órdenes de mí madre sucedió lo inevitable: La pelota de fútbol con la que jugábamos golpeó el gran espejo de aquel comedor antiguo que había pertenecido a mis abuelos. Después del regaño y de semanas de trabajos forzados en casa…